Es aquí cuando nosotros tenemos que dedicarle una atención especial para cuidar la herida de la amputación, pero, sobre todo, para brindarle ese cariño que necesita hasta que se habitúe a caminar con tres patas y vuelva a ser independiente.
Antes de señalar cómo cuidar a nuestro felino, es menester apuntar que debemos seguir todas las indicaciones dadas por el veterinario para que el animal se recupere bien y pueda hacer su vida con normalidad.
Mantén su cama limpia y la habitación, aireada
Hasta que consiga equilibrarse con las tres patas, pasará bastante tiempo tumbado en su cama, por lo que tendremos que ventilar bien ese espacio y mantenerlo limpio.
Acerca el comedero y bebedero a la zona donde esté
Para evitar que se mueva mucho, sobre todo los primeros días, es aconsejable que acerquemos los recipientes de comida y agua a la zona donde está descansando para facilitarle la tarea.
Colócalo en un lugar seguro
Apenas se podrá mover y, cuando lo haga, sus movimientos serán lentos. Por eso es importante que coloquemos al gato en un lugar seguro, protegido de otros animales o de golpes y posibles lesiones.
Pon rampas para facilitar sus movimientos
Cuando ya empiece a andar, querrá hacer lo que hacía antes con las cuatro patas: salir al balcón, a la terraza o al jardín, tumbarse en el alfeizar de la ventana, subirse a alguna superficie... En el caso de desniveles pequeños, como los de las puertas y ventanas, mientras termina de recuperarse, podemos instalar pequeñas rampas para que no fuerce la herida y pueda caminar con comodidad.
Evita que engorde
Como se moverá poco al principio, es normal que coja algo de peso. Aun así, tendremos que prestar atención a que este no sea excesivo. Para evitarlo, es recomendable que le obliguemos a moverse poco a poco conforme avance la recuperación.
Es probable que, durante este tiempo, el veterinario nos aconseje hacer cambios en su dieta para acelerar la convalecencia y evitar que coja demasiado peso. Debes seguirla al pie de la letra y consultarle cualquier duda que tengas, ya que él conoce a tu gato y sabe lo que necesita en este momento.
Ten mucha paciencia
Es normal que esté intranquilo, nervioso, algo inquieto y molesto. Tendremos que tener paciencia hasta que se acostumbre a su nueva situación.