Son los gatos de moda, los gatos azules. Arrasan en las imágenes de las redes sociales y han desbancado a otros gatos que hasta hace relativamente poco eran los protagonistas, como los gatos persas, que tantos sentimientos despertaban.
Los gatos azules se llaman así debido al color grisáceo de su pelaje, con tonos plateados y azulados. La culpa la tiene un gen, que es el encargado de que estos felinos muestren un pelaje grisáceo multitono, que oscila entre el gris ceniza y el azulado. Ello se complementa con unos ojos amarillos, cobrizos o verdes. En este artículo vamos a hablar de cuatro: el british, el azul ruso, el cartujo y el korat.
Su nombre exacto es british shorthair y es oriundo de las islas británicas. Físicamente, destaca su pelaje corto y grueso en tonos azules claros, color que se reparte de manera uniforme por el felino, sin que aparezcan manchas que salpiquen la tonalidad del pelo. Los ojos presentan un color cobrizo muy característico.
Su peso suele oscilar entre los cuatro y los siete kilos. Algunos pueden alcanzar un peso de casi ocho kilos. Por lo que respecta a su tamaño, este es grande. Los ejemplares más pequeños, grandes si los comparamos con otros gatos azules, superan por poco los treinta centímetros y los mayores no llegan a treinta y cinco.
Como su propio nombre indica, el azul ruso presenta un pelaje azulado, sin marcas, con una tonalidad brillante y reflejos plateados, que no hace sino que brille más el tono azulado del pelo. También en este caso, el tamaño de ese pelaje azulado es corto, pero fino y muy sedoso.
Sin embargo, en este caso, el color de los ojos no es cobrizo, sino verdoso, lo que resulta bastante llamativo, razón por la cual el gato azul ruso es uno de los ejemplares más elegantes. Su origen parece localizarse en el norte occidental de Rusia y, a diferencia de otros gatos azules, no es fruto de ningún cruce.
Su tamaño es todavía menor, pues suele oscilar entre los veinte y los veinte cinco centímetros; en cuanto al peso, los ejemplares más pequeños alcanzan los tres kilos y medio y los de mayor tamaño no llegan a los siete kilos.
También llamado chartreux, los gatos cartujos son de mayor tamaño que los anteriores, los azules rusos, pues algunos ejemplares, machos en su mayoría, pueden llegar a pesar casi ocho kilos y medir veintiocho centímetros. Se trata, por tanto, de un tamaño mediano-grande.
El color de los ojos dorados y cobrizos destacan sobremanera con el pelaje corto azulado ceniza, aunque algunos ejemplares cuentan con un tono más oscuro.
Pese a que se asocia a Francia, donde es el gato oficial, se cree que procedería de la antigua Persia.
Es el gato egipcio por excelencia. Resulta llamativo el pelaje gris plateado y los ojos verdes. El pelo es corto y la apariencia sedosa.
Es, de los cuatro que traemos aquí, el más pequeño, pues los gatos de menor tamaño apenas superan los dos kilos y medio de peso y miden veinticinco centímetros. Los ejemplares más grandes no llegan a treinta y un centímetros y tienen un peso de cuatro kilos y medio.