El British es una de las razas más conocidas y admiradas de nuestros días.
Se distinguen 2 variedades, el y la menos conocida, el Británico de pelo largo, que a pesar de ser menos popular que la variante de pelo corto y no estar reconocida oficialmente en el Reino Unido, cada día gana más seguidores entre los amantes del pelo largo natural.
Los British de pelo largo nacieron a raíz de cruces selectivos realizados con los y los . Estos cruces se realizaron para volver a dar al su robustez y su densidad de pelo, cualidades que perdieron tras la II Guerra Mundial debido a la escasez en esa época de criadores cualificados y de las penurias acaecidas por los acontecimientos.
El resultado indeseado de estos cruces fueren unos gatitos de pelo semilargo. En principio estos gatitos no eran utilizados en los programas de cría, lo que se ignoraba en esa época es que los gatitos nacidos de pelo corto que si se quedaban en los programas de cría, eran portadores del gen de pelo largo.
Han transcurrido más de 60 años y los British Longhair siguen apareciendo de forma espontánea con cruces de . Algunos criadores viendo la belleza de estos gatos no han podido resistirse a la crianza selectiva de esta preciosa raza.
La raza está oficialmente reconocida desde el año 2009 por la TICA (The International Cat Association) y por la WCF (World Cat Federation).
El British Longhair es un gato equilibrado e independiente, poco emocional y reservado aunque afectuoso. Suele adaptarse perfectamente al entorno ya sea en el campo o en la ciudad.
En casa, tolerará muy bien a los niños y otras mascotas aunque también estará perfectamente el solo, disfrutando de su propia compañía.
El Británico de Pelo Largo es un gato grande y musculoso, de lomo ancho y patas cortas y fuertes. Su cabeza es grande y maciza con mejillas llenas, las orejas redondas y pequeñas.
La cola, tupida y muy poblada.
El manto es semilargo y muy denso, con abundante subpelo y muy suave al tacto.
Se admiten y reconocen todas las tonalidades y las variedades colourpoint sin blanco.
El Británico de pelo largo no necesita una atención demasiado meticulosa, bastaría con cepillarlo de vez en cuando, especialmente durante los periodos de muda, y bañarlo una vez al mes o mes y medio.
Al British Longhair no se le atribuyen afecciones características, suelen ser gatos robustos y de buena salud.
Debido a su pelo largo, se podrían presentar casos de (bolas de pelo en el aparato digestivo) fácilmente tratables con alguna solución a base de aceite de parafina.
Colaboración en los textos: Ana Bustos de Gatería McNala
Gato de talla media a grande, musculoso y cobby. El pecho, los hombros y el lomo son largos y masivos.
Cortas, musculosas y redondeadas.
De longitud media y gruesa con la punta redonda, alcanza los omóplatos.
El pelaje en esta zona ha de ser tupido, bien poblado para enfatizar la belleza del gato.
Corto y fuerte.
La cabeza es redondeada, masiva, amplia con un mentón fuerte.
Corta, amplia y recta. El perfil es encorvado (sin stop).
Llenas y pronunciadas. Las almohadillas de los bigotes son redondeadas y grandes dando un contorno definido al hocico corto.
Las orejas son de talla media, amplias en la base y separadas, con puntas ligeramente redondeadas.
Los ojos son grandes, redondos y separados.
El color corresponde al color del manto.
El manto debe ser de longitud media, liso, muy denso, flexible, alejado del cuerpo y con subpelaje abundante.
Son deseables un buen collar y calzón.
Bastante áspero y crujiente, pero más suave que el del .
La textura del manto podría ser diferente en el resto de colores que en el color azul.
Se admiten y reconocen todas las tonalidades y las variedades colourpoint sin blanco.
Buscar un cachorro por Internet conlleva riesgos. Para tener clara la profesionalidad del criadero con quien contactéis, os recomendamos que...